Este retrato está inspirado en Mateo 14:23.
“Y cuando hubo despedido a la multitud, subió a un monte aparte para orar; y cuando llegó la noche, estaba allí solo”.
¿Con qué frecuencia buscamos “apartarnos para orar”? ¿Con qué frecuencia buscamos un lugar apartado del mundo y su conmoción? Sentí que este retrato me transmitía la sensación de querer hablar a solas con mi Padre Celestial, lejos de las distracciones, lejos de los problemas y temores. Nosotros dos, un Padre que me ama más de lo que puedo imaginar, espera escuchar, calmar y reafirmar Su amor por mí mientras le hablo.